Monasterio de Santa María de Ripoll (portada)



Portada de Santa María de Ripoll. Vista frontal
Portada de Santa María de Ripoll. Vista frontal (1800x1200 pixels, 400 Kb)

Portada de Santa María de Ripoll. Vista frontal
Portada de Santa María de Ripoll. Vista frontal (1080x1160 pixels, 352 Kb)

Portada de Santa María de Ripoll. Vista lateral

Portada de Santa María de Ripoll. Vista de la portada iluminada

Portada de Santa María de Ripoll. Vista lateral de la portada

Portada de Santa María de Ripoll. Detalle de las arquivoltas

Portada de Santa María de Ripoll. Detalle de las arquivoltas

Portada de Santa María de Ripoll. Lado izquierdo

Portada de Santa María de Ripoll. Lado derecho

Portada de Santa María de Ripoll. Capitel compuesto y cimacio

Portada de Santa María de Ripoll. Capitel con mantícoras afrontadas

Portada de Santa María de Ripoll. Fuste decorado con máscaras vomitando follajes

La Portada

Hacia la mitad del siglo XII resurge en Ripoll un nuevo movimiento artístico con motivo de la construcción de la portada. Emplazada a la entrada del templo y flanqueada por las dos torres del campanario, la portada es un cuerpo rectangular de 11,60 x 7,25 x 0,98 m. que asemeja un arco de triumfo. En el centro, siete arcos concéntricos sostenidos por columnas y montantes a bisel, profusamente decorados con frisos representando escenas históricas y alegóricas inspiradas en libros sagrados, enmarcan el vacío de la puerta.

La Biblia en piedra

La belleza, grandiosidad y profusión de los relieves, inspirados en los libros del Génesis, el Éxodo, de los Reyes, de los profetas Jonas y Daniel, de los Hechos de los Apóstoles y del Apocalipsis, merecen calificar a esta obra escultórica, capital en el románico catalán, como una verdadera "Biblia en piedra".

Los siete registros

La portada se halla dividida en siete registros o franjas horizontales. En el centro del friso superior de la portada (séptimo registro), la figura del Omnipotente, Pantocrator, sentado en un trono en medio de angeles y aclamado por los ancianos del Apocalipsis, preside las batallas, homenajes y vicisitudes del pueblo de Israel, que se desarrollan en cada uno de los seis registros inferiores. En el sexto registro el León de San Marcos y el toro de San Lucas junto a sendos grupos de santos con la cabeza levantada mirando hacia el Señor. La parte izquierda del quinto registro representa escenas de Salomón, su proclamación como Rey, el Juicio por el niño y el nombramiento de David como su sucesor. En la parte derecha las escenas del libro del Éxodo en la que Moisés conduce a su pueblo a la tierra prometida, la lluvia de perdices, la recogida del Manná y el paso por el mar Rojo.
Escenas de la batalla de Rafidim donde Josué vence a Amalec y escenas del traslado del Arca de la Alianza componen la parte derecha e izquierda del cuarto registro. El rey David con cetro y corona rodeado de músicos que alaban al Señor a la izquierda del tercer registro mientras que la derecha la ocupa la figura de Cristo entregando las tablas de la Ley a Moisés. El segundo registro representa las visiones de Daniel. El zócalo contiene representaciones de los pecados capitales y figuras de serpientes, leones y animales fantásticos.

Las arquivoltas

Las siete arquivoltas sostenidas por columnas y montantes a excepción de la quinta que descansa sobre las figuras de San Pedro y San Pablo contienen escenas del Nuevo Testamento, motivos de temas vegetales y representaciones del calendario que escenifican escenas de la vida a través de las labores del campo.


Iconografía de la portada
Detalles de la portada
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